martes, 11 de noviembre de 2008

Bel Canto

Siempre me ha gustado cantar y aunque desde primaria no tomo una clase de música, me decidí por fin a hacerlo y empecé la semana pasada. Según yo tengo buena voz, pero no tenía manera de comprobarlo ya que mis infrecuentes cantos en público han recibido críticas tanto buenas como malas.

Cuando vivía en Puebla como colaboradora, cantábamos a las 6:30am. A esa hora es difícil que salga la voz, pero con solo ver la mirada de urgencia en los ojos de Paula, la guía, que cantaba prácticamente sola, tomaba el cantoral y me lanzaba. Tengo que reconocer que no conocía la mayoría de las canciones ni las entonaciones, por lo que con frecuencia improvisaba y Adriana terminaba viéndome y llevándose un dedo a los labios, indicándome que mejor me quedara callada, jaja.

En cambio, la mejor crítica que he recibido fue cuando daba catecismo. Tenía muchísimos niños inquietos que corrían y brincaban constantemente de un lado a otro. Un día que me inspiré, les enseñé la canción de “Dios está aquí”. Canté sola y todos terminaron milagrosamente en silencio, hasta que uno me dijo “¡¡¡Wow, Maestra!!! ¡¡¡Se debería meter a La Academia!!!" No further comments, JAJAJA.

En vista de las opiniones encontradas sobre mis habilidades artísticas, realmente no sabía qué esperar en mi primera clase. En el Conservatorio se enseña la técnica “bel canto”, es decir emitir los sonidos utilizando el aire y su salida con el paladar blando, más que la garganta. Implica juntar las tres formas de canto, en uno solo, que no se noten las transiciones cortadas o forzadas. Para lograrlo, se necesita estar de pie y apoyarse en los músculos del abdomen, que es lo sencillo, pero se complica más con la necesidad de imaginarse por dónde tiene que salir el aire, detrás de la nariz, arriba, etc. para efectivamente sacarlo por ahí y lograr las notas deseadas.

Cuando me explicó todo esto mi maestra, la verdad se me hizo algo difícil. Después de pasar la prueba de fuego, ver si era entonada o no, empecé a cantar. Para mi sorpresa no es tan difícil como se oye, es raro utilizar los músculos para sacar el aire, y cantar hacia dentro, más que hacia afuera, pero ahí voy…

Hoy, en mi segunda clase mi profesora me dijo que tengo “voz blanca”, es decir que se nota que no la he forzado mucho o he gritado demasiado, porque canto como niña de ¡12 años!, algo muy raro en gente mayor de 20 años, que ya pasé hace algún rato. La verdad, tampoco me esperaba el comentario, porque según yo no alcanzaba rangos altos, pero al parecer sí, una de las sorpresas de la vida... Así que estaré trabajando en fortalecer la voz y en dominar la técnica para eventualmente lograr el bello canto.

1 comentario:

- dijo...

I knew it!!
Voz de niña jajajaja.
Pero al menos te diste cuenta que da para mucho! :D

Que cueros los niños, quien quita y hubieras hecho casting y en lugar de internacionalista académica, serías internacional por salir en Azteca América... jajajaja.